Suele suceder que luego de tener un período en el cual he estado leyendo y me detengo, siento que he perdido el hilo y la concentración al leer. Me pregunto en estos momentos ¿Cómo puedo retomar la lectura? Y casi siempre parece ser un momento de eureka, una frase, un título, en fin, algo muy llamativo siempre llega a mí, y en este caso no fue la excepción. Luego de muchos intentos fallidos por retomar la lectura me veo cautivada por un par de líneas que impulsaron nuevamente mi curiosidad por saber más de esto. (Aquí el texto)

“Cosas que los nietos deberían saber” de Mark Oliver Everett es un libro particular por la manera de relatar los inusuales acontecimientos que se le presentan, descrita como “La historia de un tipo que en ocasiones estuvo en situaciones similares a las de alguien famoso”. Y como no sentirse un poco identificado con algunas de las adversidades que atraviesa, aunque en su caso se ven en un punto extremo, pero que supo cómo redirigir su atención y dándole un poco de luz a toda la adversidad para poder sobrellevar los hechos.

 Un libro que es de relato fresco, en donde muchas de las situaciones te hacen volver a pensar que es lo que quieres, y que serías capaz de hacer, si venderías tu esencia la cual tanto trabajo te ha costado pero te sientes bien con lo que eres o irte al camino fácil reemplazando tu esencia por la comodidad de la moda efímera en la cual buscas complacer a todos mientras te encuentras en una batalla interna entre hacer feliz a los demás o a ti. Si lo puedes notar, ninguna de las dos opciones sería fácil.